18 may 2009

Mario Benedetti. Se Nos Va Sin Irse Jamás.

Mario Benedetti. Nacido el 14 de septiembre de 1920. Falleció ayer a los 88 años, 17 de mayo de 2009, tras sufrir en las últimas semanas un deterioro en sus condiciones de salud, según informaron sus familiares. El autor de "La Tregua" se encontraba en su hogar de Montevideo, informó radio El Espectador.
A continuación, una joya del autor y una invitación a la reflexión sobre nuestra realidad . Hace un par de días, justamente, estuve en una reunión en donde, mientras hablaban sin hablar de cosas olvidables e intrascendentes, recordé este poema, que ahora, va a modo de homenaje para este gran maestro de las letras, ganador de tantos premios, autor de tantas maravillas, que se nos va sin irse jamás.

Poema a la clase media.
Clase media
medio rica
medio culta
entre lo que cree ser y lo que es
media una distancia medio grande
Desde el medio mira
medio mal a los negritos
a los ricos
a los sabios
a los locos
a los pobres
Si escucha a un Hitler
medio le gusta
y si habla un Che medio también
En el medio de la nada
medio duda
como todo le atrae (a medias)
analiza hasta la mitad todos los hechos
y (medio confundida) sale a la calle
con media cacerola
entonces medio llega a importar
a los que mandan
(medio en las sombras) a veces, sólo a veces,
se da cuenta (medio tarde)
de que la usaron de peón
en un ajedrez que no comprende
y que nunca la convierte en Reina
Así, medio rabiosa se lamenta
(a medias) de ser el medio
del que comen otros
a quienes no alcanza a entender ni medio...
Fue ayer un día muy triste para nuestra literatura. Muy triste. Más nublado y lluvioso que de costumbre, sobre la ciudad de Montevideo.
Un poema de Mario Benedetti marcó mucho mi adolescencia. Recuerdo, cuando me sentía un bicho raro, porque prefería quedarme en casa a escribir cuentos, en vez de salir a divertirme con amigos, haber pensado: "este escritor me entiende". En esos versos hallé refugio, comprensión. Lo sentí como un espejo calmante, frente a mi desesperación, mostrándome, crudo, la verdad. Enseñándome a aceptarla. Lloré aquella tarde. Tal vez, porque vi anticipada una de las caras fundamentales de mi destino, tal vez de alegría, ante mi naturaleza y su respuesta. Me refiero a ese poema llamado:

Soledad.
Ellos tienen razón esa felicidad
al menos con mayúscula no existe
ah pero si existiera con minúscula
seria semejante a nuestra breve presoledad.

Después de la alegría viene la soledad
después de la plenitud viene la soledad
después del amor viene la soledad.

Ya se que es una pobre deformación
pero lo cierto es que en ese durable
minuto uno se siente solo en el mundo.

Sin asideros, sin pretextos
sin abrazos, sin rencores
sin las cosas que unen o separan
y en esa sola manera de estar solo
ni siquiera uno se apiada de uno mismo.

Los datos objetivos son como sigue.

Hay diez centímetros de silencio
entre tus manos y mis manos una
frontera de palabras no dichas
entre tus labios y mis labios
y algo que brilla así de triste
entre tus ojos y mis ojos claro
que la soledad no viene sola.

Si se mira por sobre el hombro mustio
de nuestras soledades se vera un
largo y compacto imposible un sencillo
respeto por terceros o cuartos
ese percance de ser buenagente.

Después de la alegría
Después de la plenitud
Después del amor
Viene la soledad.

Conforme pero Comprobar ortografía
que vendrá después
de la soledad.

A veces no me siento tan solo
si imagino mejor dicho si se
que mas allá de mi soledad y de
la tuya otra vez estas vos
aunque sea preguntándote a solas
que vendrá después de la soledad.

Agrego: "después de Mario viene la soledad". Enraizado queda, para siempre, a nuestros corazones. Los dejo con este homenaje a Mario Benedetti: "Palabras verdaderas".

Subido a YouTube por Elortiba.

2 comentarios:

Mirati dijo...

Oi,
nada é tudo nesse grande autor. Eu ouvi falar dele em estudos na universidade. Mas, não consegui encontrá-lo nas estantes de uma livraria, antes do ônibus de regresso chegar, na tão distinta C. Florida. Mas, inspiro nesse momento cada um dos poemas compartilhados nesse Blog. A Argentina que eu conheci não era tão colorida como nos anúncios para turistas e nem tão compreensiva como nos guias de viajantes, mas ainda assim Senhora, Mãe e Senhorita de um povo tão marcado por repressões e manifestações de liberdade. Lugar da prosa e verso que nenhum cartão postal poderá ser capaz de retratar. O Mario se vai, mas deixa-nos com a esperança a mesma esperança dos goles d'água, vai-se um Mário e quem sabe chega-nos um Franco.

Amortiguaciones. dijo...

Amiga, graças por tuas palavras, soube que estiveste em Buenos Aires, mas eu estive de viagem e não pude conhecer-te. Espero fazê-lo a próxima vez. Formoso teu blog como sempre. Agora este fim de semana o lerei com mais detenimiento. Estou estudando e trabalhando muito pelo que me custa manter meu blog a diário. Mas sempre seguirei publicando. Teu tens muito talento para escrever. Um beijo.