15 feb 2009

Sobre Metas Y Templos.

Me espera un largo año. Si Dios quiere muy bueno, aunque intenso. Espero no fallarme. No cansarme tanto como el año pasado. Nuevos proyectos musicales y literarios. La universidad. Trabajar y estudiar. Vienen bastante entallados mis días.
Cuento eso sí, con la contención de mis seres queridos. Sentirme acompañado es algo invalorable. Aunque esa participación, esa presencia constante de los demás, también provoca, como efecto colateral, una gran presión. Son mi público, esperando que actúe con el menor margen de error posible. Esperan mucho porque me conocen o creen conocerme mucho. Y saben que al final, cuando halla cumplido los objetivos, voy a darles las gracias por insistir y no dejarme renunciar. Y a la vez, se van a sentir un poco más realizados a través de mis logros. Y no tiene nada de malo. Por un lado, venimos al mundo a levantar nuevos templos, los propios; y por el otro, a restaurar y proteger a los viejos.

No hay comentarios: